Chiloé es mundialmente conocido por sus atractivos naturales y culturales que, año a año, reúnen a miles de turistas, tanto nacionales como extranjeros. Sin embargo, el archipiélago también cuenta con puntos de interés histórico y, en los siguientes párrafos, te contamos sobre los principales.
El archipiélago de Chiloé se compone por 10 comunas, y está separado del continente por el canal de Chacao. Ahí, en un rincón del mundo donde los mitos cobran vida, existen ciertas zonas de interés histórico que vale la pena visitar en tu próximo viaje. Toma nota:
1. Conchales
Uno de los lugares históricos de Chiloé más importantes lo constituyen los conchales, verdaderas ventanas al pasado desde la que es posible dar cuenta de las culturas que habitaron la zona hace miles de años.
Uno de los puntos más importantes en esa categoría se ubica en la provincia de Ancud, en la zona que hoy se conoce como Golfo de Quetalmahue. Ahí, a orillas del río Quilo, se asentaron los primeros grupos humanos (Chonos), hace aproximadamente 6.200 años. En estos conchales es posible encontrar puntas de flechas, cuchillos y lanzas, entre otros elementos líticos que los indígenas utilizaban para cazar, comer y defenderse. Además, también se han hallado “enterratorios”, lugares en donde los habitantes del lugar enterraban a sus muertos bajo capas de conchas.
2. Las iglesias de Chiloé
La cultura chilota ha forjado su arquitectura gracias a la madera, material noble utilizado tanto para los cimientos como para las terminaciones de distintos tipos de construcciones, desde casas hasta embarcaciones, sin olvidar las iglesias, gran patrimonio de la zona.
A lo largo de las islas que componen el archipiélago, es posible encontrar decenas de iglesias con cientos de años a su haber. Algunas han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco -en el año 2000-, mientras que otras se encuentran en proceso de restauración. Destacan entre ellas la Iglesia San Francisco y la de Nercón (Castro), la Iglesia de Vilupulli (Chonchi) y la Iglesia de Colo situada en Quemchi, uno de los pueblos más impresionantes de la zona y, sin duda, de los lugares históricos de Chiloé de mayor atractivo.
3. Fuertes españoles: vestigio de la conquista
Debido a su cercanía con el Estrecho de Magallanes, Chiloé fue parada obligada para las embarcaciones españolas que llegaban a esta parte del mundo en busca de tierras y riquezas.
A sabiendas del carácter estratégico de la zona, el virrey del Perú de aquel entonces -Manuel de Amat- mandó a construir una serie de fuertes y baterías para repeler posibles ataques de corsarios, piratas y cualquier enemigo de la monarquía española.
La ciudad de Ancud alberga uno de los fuertes españoles más conocidos: el San Antonio. Construido en 1770, está edificado en la parte alta de la urbe y, en aquel entonces- ostentaba potentes cañones de bronce capaces de defender el lugar de cualquier ataque externo. A éste, se suman las construcciones de la península de Lacuy, entre las que destacan el fuerte Ahui y las baterías de Baterías de Chaicura y Balcacura.
Los lugares históricos de Chiloé son verdaderas ventanas hacia el pasado que, aún en la actualidad, son capaces de contar historias de tiempos en que otras culturas habitaron y disputaron la titularidad de estas mágicas tierras. ¿Te imaginas recorrer estos parajes? Mejor deja de imaginar y embárcate ya en una aventura que no olvidarás.